Uno de los sospechosos del robo a mano armada de Kim Kardashian ha dicho que planea asumir la responsabilidad de su papel en el robo de 2016 y disculparse en el tribunal.
El juicio comienza el lunes en París.
Yunice Abbas, de 71 años, que ha admitido públicamente su participación en el robo, se encuentra entre los 10 sospechosos que enfrentan cargos que incluyen robo a mano armada y secuestro.
"Me disculparé", dijo Abbas a la Associated Press.
"Lo digo con sinceridad", añadió.
Se espera que Kardashian, de 44 años, testifique en persona en el juicio, que está programado para durar hasta el 23 de mayo.
En entrevistas y en el reality show de su familia, ha descrito el terror que sintió después de que unos ladrones le apuntaran con un arma para robarle joyas por valor de millones de dólares de un apartamento en el que se alojaba durante la Semana de la Moda de París. Ella dijo que pensó que la violarían y la matarían.
Abbas ha declarado que actuó como vigía en la zona de recepción del primer piso, asegurándose de que la ruta de escape estuviera despejada. Agregó que estaba desarmado y no amenazó personalmente a Kardashian, pero admitió que compartía la responsabilidad del crimen.
Fue arrestado en enero de 2017 y pasó 21 meses en prisión antes de ser liberado bajo supervisión judicial.
En su relato a los investigadores, Kardashian describió a dos hombres que entraron a la fuerza en su dormitorio y le apuntaron con un arma, exigiéndole su anillo. Dijo que la ataron con cables y cinta plástica mientras buscaban sus joyas, incluido su anillo de compromiso valorado en varios millones de dólares.
Ella dijo a los investigadores que los hombres la obligaron a ir al baño antes de huir y ella se liberó.
El portero de la residencia, retenido a punta de pistola y obligado a conducir a los ladrones hasta su apartamento, también sufrió impacto psicológico.
Los investigadores encontraron ADN de Abbas en las ataduras de plástico utilizadas para atar las manos del portero.
Cuando se le preguntó sobre el trauma que sufrió Kardashian, Abbas dijo que no había pensado en ello.
Según Abbas, pocos minutos después de que comenzara la redada, sus asociados bajaron del apartamento de Kardashian y le dieron una bolsa de joyas.
La justicia francesa ha estimado que los objetos robados tienen un valor total de 6 millones de dólares.
Abbasi ha dicho que no conocía la identidad de Kardashian en el momento del robo.
"Me hablaron de una persona famosa, la esposa de un rapero. Esa era toda la información que tenía. Hasta la mañana siguiente, cuando oí hablar de ella en la televisión. Ahí fue cuando me di cuenta de quién era", dijo.
Añadió que detallará su papel durante el juicio, que se desarrollará con jurado, un procedimiento en Francia reservado a los delitos más graves.
"Soy solo un desconocido. No fui yo quien organizó el evento. Asumo mi parte de responsabilidad", dijo.
La mayoría de los sospechosos han negado su participación, a excepción de Abbas y otro hombre cuyo ADN también fue encontrado en la escena.
