La misión de la OTAN en Kosovo, KFOR, ha amenazado con reaccionar si se toman medidas para abrir el puente central de Ibri sin un acuerdo previo con Serbia.
Lo hizo el día en que las autoridades de Kosovo notificaron a esta misión, que transporta tropas a través del puente, que su estabilidad se pondría a prueba.
Las pruebas, según funcionarios del gobierno, se realizarán antes de que el puente se abra al tráfico vehicular.
La KFOR no ha indicado su posición sobre la prueba, pero ha advertido de las acciones que puede emprender.
"No dudaremos en afrontar cualquier acontecimiento que pueda afectar el entorno de seguridad y la estabilidad regional, respetando plenamente nuestro mandato que se origina en la ONU. La posición de la KFOR ha sido clara y constante en todo momento. Cualquier decisión sobre la apertura del puente principal sobre el río Ibero debe tomarse en el marco del diálogo mediado por la UE entre Belgrado y Pristina", afirmó la KFOR.
Kosovo y Serbia tienen dos acuerdos para la apertura del puente Ibri. Sobre la base de ellos, la UE también ha finalizado el proyecto sobre cómo debería funcionar el tráfico. Sin embargo, el documento no se ha implementado durante muchos años.
Durante el martes, el ministro del Interior, Xhelal Sveçla, y el ministro de Administración del Gobierno Local, Elbert Krasniqi, permanecieron en el norte.
Tras la inspección que realizó del puente, Sveçla insistió en que debía abrirse al tráfico de vehículos, pero no indicó cuándo se podrían tomar medidas para ello.
"El puente se abrirá, no hay razón para no abrirlo, cuándo se abrirá, ese es un tema que lo evaluarán los expertos".
El puente sobre el río que divide étnicamente Mitrovica está cerrado al tráfico de vehículos desde el final de la guerra en Kosovo.
La barricada se mantiene desde hace mucho tiempo y miembros armados de la organización conocida como "Rojat e Ura" están apostados en puntos estáticos cerca de ella.
Los obstáculos fueron eliminados en 2016, tras negociaciones mediadas por la UE. Sin embargo, el municipio de Mitrovica Norte, dirigido por Lista Serbe, había levantado un muro cerca del puente para impedir el acceso de vehículos.