En una narrativa llena de metáforas y profunda sensibilidad, Jetlira Avdiaj, en su novela "La Tierra del Padre", estrenada el viernes por KOHA Publishing en la Feria del Libro, confronta al lector con la realidad emocional de una sociedad que a menudo oculta sus heridas con silencio. Habla de la frialdad familiar, de los enfrentamientos que ocurren en nombre de la tierra y el honor, y de la falta de sensibilidad que la distancia de sus seres queridos.
A través de una poderosa narrativa que comienza con una metáfora simple –dos pájaros en busca del lugar más bello del mundo–, la joven escritora Jetlira Avdiaj, ganadora del premio “Rexhai Surroi” el año pasado con la novela “La tierra del padre”, ha desarrollado la novela en una profunda inmersión espiritual en la tierra que moldea al hombre con las cicatrices que deja.
Y el viernes, en el tercer día de la 25ª Feria del Libro de Pristina, en las instalaciones del Palacio de la Juventud y los Deportes, atrajo la atención la promoción de esta novela, una obra que penetra profundamente en los conflictos familiares, la herencia y la identidad personal.
En una narrativa llena de metáforas y profunda sensibilidad, Avdiaj confronta al lector con la realidad emocional de una sociedad que a menudo oculta sus heridas con silencio. Habla de la frialdad familiar, de los enfrentamientos que surgen en nombre de la tierra y el honor, y de la falta de sensibilidad que la distancia de sus seres queridos. A través del personaje de Platori —símbolo de una generación sumida en el silencio interior—, aborda destinos compartidos que no son solo personales, sino colectivos. En esencia, «La Tierra del Padre» se convierte en una narrativa sobre el peso de la herencia y sobre la incapacidad de romper el ciclo de errores que se repiten a lo largo de las generaciones.
Como manuscrito, cuando recibió el premio de literatura "Rexhai Surroi" el pasado mes de diciembre, la profesora universitaria Blerta Ismajli, en nombre del jurado, dijo que habían decidido premiar una obra literaria que confronta al lector con un tema esencial para todos, la pertenencia a la familia.
En la novela que se aprecia hoy, el conflicto por las tierras familiares y la herencia es central, pero comienza con la ruptura de la relación entre madre e hijo. El retorno a las raíces y el objetivo de poseer la tierra en la patria —como un intento de reconectar con las raíces familiares y patrióticas— son el eje sobre el que se desarrolla el conflicto que recorre toda la novela —dijo el profesor Ismajli al leer el razonamiento—.
En su discurso durante la promoción, la autora enfatizó que esta no es simplemente una historia sobre patrimonio material, sino un reflejo silencioso de la violencia emocional, la incomunicación y el peso invisible que el hombre lleva en nombre de la tierra, el honor y la familia.
No empiezo la novela 'La Tierra del Padre' como una guerra familiar que mi padre abandonó al cerrar los ojos, sino con dos pájaros que querían saber cuál era el lugar más hermoso del mundo. El lugar más hermoso del mundo, la tierra que nutrió nuestras raíces y nos hizo inquebrantables, es el lugar donde tenemos nuestras raíces, la tierra de nuestro padre, la tierra donde crecimos, donde dimos nuestros primeros pasos, donde caímos por primera vez, con cuyas piedras nos arañaron las rodillas y sangramos —dijo la autora Jetlira Avdiaj—.
El escritor ha indicado que la novela también habla del fenómeno de la vida dinámica, debido a la cual los miembros de la familia a menudo son ignorados.
"Sabes, vivimos una vida tan dinámica que, al regresar a casa, estamos demasiado ocupados como para hablar siquiera con nuestros familiares. Al contrario, nos sentimos obstaculizados por ellos. Al salir por la puerta del patio, somos las personas más queridas por los desconocidos", añadió.

Ante este fenómeno, afirmó que debemos culparnos a nosotros mismos, en lugar de culpar a los padres, y a través de este relato pidió desviar el camino del “padre” cuando se demuestre que está equivocado.
No podemos culpar a nuestros padres por la tierra de nuestro padre. Por la tierra de nuestro padre, que regamos con sangre, debemos culparnos a nosotros mismos, porque sabemos que nuestro padre cometió un error y, conociendo su error, seguimos caminando por esos mismos pasos sin detenernos, sin romper el error, porque un puño y más alimentan más el ego que un hermano y una hermana juntos, dijo Avdiaj.
A través del personaje de Platón, ha demostrado que ha tratado de sacar a la luz a todos aquellos que se ahogan en el océano del olvido y la indiferencia.
Lo escribí de golpe, como un buceador que se sumerge y toca el fondo del océano con un solo aliento, y sin soltarlo, sube a la superficie. Encontré al Platón en el fondo del océano, donde ni siquiera la luz del sol llega, y en ese fondo hay cientos de miles de Platones que no saben nadar hacia la superficie, hacia la luz del sol. A algunos los ahogó su madre al elegir a sus hijos como sus seres más queridos; a otros los ahogó su padre al preservar el orgullo de ser el hombre de la casa; a otros los ahogó la codicia, el interés, el ego. Muchos otros se ahogaron y se están ahogando por la tierra de su padre, como tierra y como identidad, una tierra que nunca ha sido nuestra y nunca lo será», reflexionó durante el debate con el editor del libro, Binak Kelmendi, en el panel dirigido por el periodista Shaban Maxharraj.
El escritor y crítico Kelmendi ha elogiado la novela como una obra con una estructura clásica y una línea narrativa clara, donde cada elemento de la historia sirve para profundizar en el tema principal.
Esta novela fue escrita por una joven que ya es casi una escritora experimentada. Considero que es una novela clásica, porque toda la historia tiene un eje y una línea principal de desarrollo, alrededor de la cual y a través de la cual se desarrollan otras ideas esporádicas que complementan el tema principal de la novela. Es clásica porque el personaje principal tiene en sus manos el desarrollo de todos los acontecimientos que trata la novela, afirmó el editor del libro, Binak Kelmendi, durante la promoción.

Destacó que la experiencia profesional del autor como abogado aporta una dimensión adicional a la novela, especialmente en la forma en que aborda temas como las injusticias silenciosas en la familia, los derechos de herencia y la violación de los sentimientos en nombre del orgullo. «Patria» ha sido descrita como un relato agudo y doloroso sobre la identidad y las relaciones que a menudo duelen más de lo que conectan, dentro de las paredes del hogar.
"Abogado de profesión, el autor de esta novela logra crear escenas y tramas literarias que a veces parecen muy similares a las páginas de novelas realistas, pero que en esta novela siempre tienen una autenticidad típicamente albanesa: el deseo, la codicia y, sobre todo, el intento de ser despojado de su parte de la herencia, a veces por familiares", añadió Kelmendi.
La promoción de la novela «La Tierra del Padre» ha demostrado una vez más el poder de la literatura para abordar temas sociales y familiares complejos, convirtiéndose en un espejo silencioso de realidades difíciles de expresar en la vida cotidiana. A través de la historia y las figuras simbólicas, el libro no solo invita a la reflexión, sino que también fomenta una nueva sensibilidad hacia la pertenencia, la identidad y el valor del patrimonio.
KOHA Publications, que presenta este año en la Feria del Libro cuatro nuevos títulos y más de 150 obras en total, continúa aportando voces que tocan temas de peso y construyen puentes entre el lector y un mundo en constante cambio.